Según sus propias palabras "se trata de una figura cruciforme, magistralmente tallada, con evidente antropomorfismo gracias a un arco a modo de piernas y un pene magnificado con la prolongación del pie de la cruz. Tiene 30 centímetros de alto por la mitad de anchura en los brazos extendidos. El diámetro del semicírculo inferior que hace de piernas guarda la misma proporción."
En principio, el supuesto petroglifo presenta una considerable similitud con las pinturas rupestres descubiertas en la asturiana Cueva de Demo en los años 80. (Fotos de La Voz de Asturias)


De confirmarse la veracidad del hallazgo, que ya ha sido puesto en conocimiento de la Consejería de Cultura, se trataría de un descubrimiento de considerable importancia y sería necesario tomar las medidas oportunas para garantizar su conservación.
Un saludo.